¿Alguna vez te has preguntado cómo investiga la policía un móvil en una investigación? Detrás hay un proceso meticuloso que combina tecnología avanzada, normas legales y el trabajo de peritos informáticos expertos en móviles. En Laby te lo explicamos de forma clara, con ejemplos y lo que nadie suele contarte.
¿Cómo investiga la policía un móvil?
Todo empieza con la incautación del dispositivo. La policía debe preservar el móvil para evitar que se borren datos o se altere la información. Para ello, suelen guardarlo en bolsas Faraday, que bloquean las señales y evitan accesos remotos.
Después, un perito informático de móviles realiza una copia forense del dispositivo con herramientas especializadas, como Cellebrite UFED o Magnet AXIOM. Esto permite analizar el contenido sin modificar los datos originales. Así se garantiza que las pruebas sean válidas en un juicio.
¿Puede la policía extraer datos de un teléfono?
Sí, pero con ciertas condiciones. En la mayoría de los casos la policía necesita una orden judicial para acceder al contenido de un móvil. Solo en situaciones de emergencia (por ejemplo, si hay riesgo para una persona) podrían actuar sin orden previa.
Con la autorización adecuada, los agentes pueden extraer mensajes, llamadas, fotos, ubicaciones y hasta archivos eliminados. Eso sí, el proceso debe hacerse bien: si no, las pruebas pueden ser impugnadas. Por eso es clave que el análisis lo realice un profesional con experiencia.
¿Cómo rastrea la policía un móvil?
La policía puede rastrear un móvil a través de las señales que envía a las antenas de telefonía o mediante el GPS, si está activado. Esto permite conocer dónde estuvo el dispositivo o dónde se encuentra en tiempo real, si se tiene acceso al sistema.
Eso sí, estas acciones se hacen bajo control judicial y respetando el derecho a la privacidad. Las operadoras colaboran facilitando datos cuando hay orden judicial o se trata de una emergencia.
¿Qué hace la policía con el IMEI de un móvil?
El IMEI es el número único que identifica cada teléfono. La policía puede usarlo para pedir a las operadoras que bloqueen el dispositivo, de modo que no funcione en ninguna red. Esto es útil en casos de robo o pérdida.
Además, el IMEI permite rastrear intentos de conexión del móvil, aunque se cambie la tarjeta SIM. Eso sí, estas acciones deben estar respaldadas por la ley y las órdenes judiciales correspondientes.
El valor del análisis forense móvil en un juicio
Cuando los datos de un móvil se presentan como prueba en un juicio, el informe de un perito informático móvil es fundamental. Este experto asegura que todo el proceso se ha hecho respetando la cadena de custodia y explica los hallazgos de forma clara para que el tribunal los entienda y acepte.
Si el análisis se hace mal, las pruebas pueden quedar invalidadas. En Laby trabajamos con las herramientas más avanzadas y un equipo que sabe cómo garantizar la validez de la evidencia en un proceso legal.
Herramientas que usa la policía para analizar un móvil
Entre las más usadas está el Cellebrite UFED, capaz de extraer datos incluso de móviles bloqueados. También se emplean Magnet AXIOM, XRY o Oxygen Forensic Suite, según el caso.
Pero ojo: no todo es cuestión de tecnología. La formación y experiencia del perito son lo que harán que los datos obtenidos sirvan realmente como prueba.